Las cejas son uno de los elementos fundamentales del rostro: son el marco de nuestra mirada y por esa función hay que cuidarlas en todo momento para que tengan una forma bien definida y limpia.
Unas cejas mal cuidadas o mal maquilladas pueden cambiar la fisionomía del rostro de forma sustancial y marcar defectos en vez de minimizarlos.
Todas las que tienen unas cejas poco pobladas o con una forma que no va a definir su mirada tienen la necesidad de maquillar los pelitos cada día. Eso conlleva que el make-up diario se alargue apróximadamente unos 5/15 minutos según la experiencia de cada una.
La solución perfecta sería un tratamiento de tipo permanente o semipermanente.
A la hora de elegir el más idóneo para nosotras, nos encontramos con dos tipos de técnicas que dan la impresión de ser muy parecidas entre ellas, pero que en realidad no lo son: la de la micropigmentación y la del tatuaje permanente. En cierto sentido, la primera es la evolución de la segunda, pero ¿qué cambia? ¿En qué consisten estas dos soluciones estéticas?
Las dos técnicas de maquillaje permanentes quieren simular un efecto natural de cejas rellenas y definidas; ambos trabajos quieren ajustar pequeñas asimetrías o carencia de pelitos debido al mal uso de las pinzas de depilación o en el peor de los casos a enfermedades.
Son unas especialidades enmarcadas en el campo de la estética cuyo fin es el de embellecer, corregir o mejorar ciertos rasgos de la anatomía corporal, tanto masculina como femenina.
La diferencia sustancial entre estas dos técnicas es la profundidad en la que se inserta el pigmento en el derma.
Antes de proceder a la ejecución de una o de otra, gracias a la ayuda de una especialista, se configura el dibujo de las cejas para ver el resultado final en «anteprima» antes de proceder para poder modificar los detalles según el gusto del cliente. Se miden los centímetros, el grosor, el arco y el punto máximo siempre en relación con las líneas del rostro del cliente para que el resultado sea armonioso. Otra condición necesaria antes de ambas técnicas es cuidar e hidratar en profundidad la piel para que esté lista al tratamiento. Y, por último, la micropigmentación como el tatuaje de cejas son tratamientos que se desaconsejan durante las épocas del año de mayor calor por temas de sudoración de la piel.
Vamos a analizar en detalle.
Tatuaje de cejas
El tatuaje de cejas entra en las técnicas de maquillaje permanente y consiste en la introducción mecánica de los pigmentos a través de una aguja y con una máquina muy parecida a la de los tatuajes tradicionales.
Con esta técnica, el pigmento entra en la piel en uno de sus estratos más profundos, por lo que el color utilizado tiene que ser específico para ese tipo de tatuaje (porque éste no va a cambiar de tonalidad a diferencia de los tatuajes tradicionales que con el tiempo asumen un color distinto).
Después de la primera sesión se efectuará una segunda de retoque unos 40/50 días después.
Con ese tipo de tratamiento en general el resultado es hiper definido y a veces no se logra el efecto natural.
La micropigmentación de cejas
La micropigmentación es la técnica más utilizada en los últimos años y se lleva a cabo mediante la utilización de una aguja la cual posee una punta para diseñar los pelos y otra aguj de tres o cinco puntas para recrear la redensificación.
Los pigmentos son orgánicos e hipoalergénicos, muy seguros para la piel. El color se inserta en el primer estrado de piel (epidermis) y de forma difuminada hasta llegar al efecto deseado o simulando los pelitos uno a uno. Esa técnica es muy requerida y la mejor entre las dos en cuanto recrea unas cejas con un efecto natural, para favorecer el rostro del cliente.
El tiempo de espera entre el dibujo inicial y la segunda sesión de retoque es de aproximadamente 3/ 4 semanas.
Las cejas se verán enseguida rellenas y definidas sin resultar «artificiales».
No obstante, la micropigmentación se considera el tratamiento con efecto más natural entre los dos citados y una garantía auténtica de calidad.
Duración de los tratamientos
La duración de un tratamiento respecto al otro cambia según la profundidad de inyección del pigmento en las cejas, pero hay otros factores que no hay que infravalorar como el tipo de piel, la edad, la exposición solar, el uso constante de medicamentos, etc. Imprescindible es curar bien la zona después de la sesión, evitando de rascar o quitar pequeñas costras que podrían formarse en los días justo después del tratamiento para preservar la definición del diseño.
Los costes de las técnicas varían según el trabajo que hay que hacer (definir y rellenar, solo definir, diseñar completamente) pero van de 300 a 500€.
Son tratamientos estéticos profesionales que además de mejorar el aspecto son también un válido recurso para ahorrar tiempo si conducís una vida muy frenética.
Es muy importante tanto para una mujer como para un hombre, sentirse bien con su aspecto y, a veces, un tratamiento estético de este tipo, aunque sea mínimo, puede eliminar pequeñas inseguridades.
La micropigmentación es la mejor solución estética entre las dos: recrea unas cejas con líneas armónicas y naturales, el resultado es siempre favorecedor para el rostro y confiere mucha luminosidad a la mirada. Nuestro centro ofrece dos tipos de técnicas para un efecto súper natural: la técnica del sombreado de cejas y la de pelo a pelo. Estas técnicas son perfectas para conseguir un resultado con un efecto suave, elegante y apto para todos los días.
¡La comunicación no verbal viaja a través de los ojos, y las cejas son parte de nuestra mirada!
En conclusión, si las cejas son vuestra «obsesión», el consejo es el de confiar en un centro estético cualificado y hacer esta experiencia con la seguridad de que, al final del proceso, quedaréis absolutamente satisfechos.
Si tiene alguna pregunta, por favor no dude en contactarnos acerca de Instagram o de nuestro sitio web.
Alessandra Ferrara para Ana Paula Landi Micropigmentación